Una vez más Liga Joven sufre la discriminación habitual cuando alza la voz para reivindicar derechos sociales. Esta vez en Guadalajara, donde un sindicato de estudiantes incompetente e incapaz de aceptar una alternativa, haciendo alarde del paternalismo, lloriquea a la policía para impedir que se nos escuche, echando mano una vez más del sistema y sus mercenarios.
Sin embargo, nuestra fuerza y entusiasmo necesita de más que llantos y represión para ser aplastados. Nosotros somos la alternativa social y nacional. Somos España y vamos a defenderla, porque sus banderas son minoría y la rojigualda el estandarte de un Pueblo entero. Escogemos intervenir con acciones que no están aún a la altura de nuestros sueños antes que la nostalgia débil de no hacer nada y causar la tuberculosis de nuestras ideas. Adelante Liga Joven.