Motines, encamisadas, cenáculos, cultura, bailes, disidencia, religiosidad, activismo social, abordajes y pensamientos corsarios desde la otra orilla del Guadalquivir, un islote de rebeldía y libertad.

miércoles, 24 de octubre de 2012

Los sevillanos ilustres





La fachada este del Palacio de San Telmo fue decorada a finales del siglo XIX con una serie de esculturas que representan algunos personajes sevillanos de gran relevancia. Las obras fueron encargadas en 1895 a Antonio Susillo por parte de los duques de Montpensier, mecenas del artista, y que habitaban en el palacio por aquellos días.

En estas esculturas, realizadas en piedra, se puede observar la gran calidad de la obra de Susillo. El tratamiento de los ropajes, así como el estudio psicológico de los personajes, pone de manifiesto la gran valía del escultor, detrás de esos rostros de piedra se esconden unos sentimientos y unos valores. La Corte de los Montpensier intentó rivalizar durante años con la de Madrid por lo que no es de extrañar que usase el arte como medio propagandístico, enlazando su linaje con la historia de la ciudad a través de sus hijos más ilustres.






Antonio Susillo (1857-1896) es uno de esos artistas geniales a los que la Historia del Arte no ha ubicado en el lugar que se merecen. Tal vez por su repentina muerte o quizás por haber nacido en Sevilla, ciudad que a pesar de haber sido un foco cultural de primer orden un siglo antes, en la segunda mitad del siglo XIX, se encontraba muy alejada de los grandes centros artísticos europeos como París o Roma, lo cierto es que este magnífico escultor ha pasado bastante desapercibido.